Calendario eventos

Octubre 2024
D L M X J V S
29 30 1 2 3 4 5
6 7 8 9 10 11 12
13 14 15 16 17 18 19
20 21 22 23 24 25 26
27 28 29 30 31 1 2

Proximos Eventos

Sin eventos

Acceso

ANIVERSARIOS PROFESIÓN RELIGIOSA

PROVINCIA DE CATALUÑA

AÑO 2019

   

BODAS DE ORO 8 JUNIO:

SOR ROSARIO AZPARREN ARISTIZÁBAL....................................................BARCELONA

 

BODAS DE DIAMANTE 5 DE JULIO:

SOR MERCEDES TRANCHE ECHEVERRÍA......................................................ZARAGOZA

SOR NIEVES ORTEGA SEBASTIÁN....................................................................TUDELA

SOR PRESENTACIÓN BEORLEGUI ARMENDÁRIZ...............................................TUDELA

 

BODAS DE BRILLANTE 5  DE  JULIO

SOR PILAR URZAINQUI  HUALDE.................................................................PAMPLONA

SOR ARACELI ESCRIBANO  LÓPEZ................................................................ZARAGOZA

                                

BODAS DE ORO 11 DE  DICIEMBRE:

SOR FELISA GRACIA BONET.........................................................................ZARAGOZA

SOR MONTSERRAT  HUARTE  SARASA..............................................................SARRIÁ

 

BODAS DE DIAMANTE 13  DE  DICIEMBRE:

SOR JOSEFINA ARBIZU PÉREZ.......................................................................BURLADA

SOR CARMEN SORIANO REIG........................................................................SABADELL

Mensaje del Papa Francisco para la Jornada Mundial del Enfermo (11-2-2019) La Jornada Mundial del Enfermo es el 11 de febrero, fiesta de Nuestra Señora de Lourdes MENSAJE DEL SANTO PADRE FRANCISCO PARA LA XXVII JORNADA MUNDIAL DEL ENFERMO 2019: «Gratis habéis recibido; dad gratis» (Mt 10,8) Queridos hermanos y hermanas: «Gratis habéis recibido; dad gratis» (Mt 10,8). Estas son las palabras pronunciadas por Jesús cuando envió a los apóstoles a difundir el Evangelio, para que su Reino se propagase a través de gestos de amor gratuito. Con ocasión de la XXVII Jornada Mundial del Enfermo, que se celebrará solemnemente en Calcuta, India, el 11 de febrero de 2019, la Iglesia, como Madre de todos sus hijos, sobre todo los enfermos, recuerda que los gestos gratuitos de donación, como los del Buen Samaritano, son la vía más creíble para la evangelización. El cuidado de los 1/4 enfermos requiere profesionalidad y ternura, expresiones de gratuidad, inmediatas y sencillas como la caricia, a través de las cuales se consigue que la otra persona se sienta “querida”. La vida es un don de Dios —y como advierte san Pablo—: «¿Tienes algo que no hayas recibido?» (1 Co 4,7). Precisamente porque es un don, la existencia no se puede considerar una mera posesión o una propiedad privada, sobre todo ante las conquistas de la medicina y de la biotecnología, que podrían llevar al hombre a ceder a la tentación de la manipulación del “árbol de la vida” (cf. Gn 3,24). Frente a la cultura del descarte y de la indiferencia, deseo afirmar que el don se sitúa como el paradigma capaz de desafiar el individualismo y la contemporánea fragmentación social, para impulsar nuevos vínculos y diversas formas de cooperación humana entre pueblos y culturas. El diálogo, que es una premisa para el don, abre espacios de relación para el crecimiento y el desarrollo humano, capaces de romper los rígidos esquemas del ejercicio del poder en la sociedad. La acción de donar no se identifica con la de regalar, porque se define solo como un darse a sí mismo, no se puede reducir a una simple transferencia de una propiedad o de un objeto. Se diferencia de la acción de regalar precisamente porque contiene el don de sí y supone el deseo de establecer un vínculo. El don es ante todo reconocimiento recíproco, que es el carácter indispensable del vínculo social. En el don se refleja el amor de Dios, que culmina en la encarnación del Hijo, Jesús, y en la efusión del Espíritu Santo. Cada hombre es pobre, necesitado e indigente. Cuando nacemos, necesitamos para vivir los cuidados de nuestros padres, y así en cada fase y etapa de la vida, nunca podremos liberarnos completamente de la necesidad y de la ayuda de los demás, nunca podremos arrancarnos del límite de la impotencia ante alguien o algo. También esta es una condición que caracteriza nuestro ser “criaturas”. El justo reconocimiento de esta verdad nos invita a permanecer humildes y a practicar con decisión la solidaridad, en cuanto virtud indispensable de la existencia. Esta conciencia nos impulsa a actuar con responsabilidad y a responsabilizar a otros, en vista de un bien que es indisolublemente personal y común. Solo cuando el hombre se concibe a sí mismo, no como un mundo aparte, sino como alguien que, por naturaleza, está ligado a todos los demás, a los que originariamente siente como “hermanos”, es posible una praxis social solidaria orientada al bien común. No hemos de temer reconocernos como necesitados e incapaces de procurarnos todo lo que nos hace falta, porque solos y con nuestras fuerzas no podemos superar todos los límites. No temamos reconocer esto, porque Dios mismo, en Jesús, se ha inclinado (cf. Flp 2,8) y se inclina sobre nosotros y sobre nuestra pobreza para ayudarnos y regalarnos aquellos bienes que por nosotros mismos nunca podríamos tener. En esta circunstancia de la solemne celebración en la India, quiero recordar con alegría y admiración la figura de la santa Madre Teresa de Calcuta, un modelo de caridad que hizo visible el amor de Dios por los pobres y los enfermos. Como dije con motivo de su canonización, «Madre Teresa, a lo largo de toda su existencia, ha sido una generosa dispensadora de la misericordia divina, poniéndose a disposición de todos por medio de la acogida y la defensa de la vida humana, tanto la no nacida como la abandonada y 2/4 descartada. […] Se ha inclinado sobre las personas desfallecidas, que mueren abandonadas al borde de las calles, reconociendo la dignidad que Dios les había dado; ha hecho sentir su voz a los poderosos de la tierra, para que reconocieran sus culpas ante los crímenes […] de la pobreza creada por ellos mismos. La misericordia ha sido para ella la “sal” que daba sabor a cada obra suya, y la “luz” que iluminaba las tinieblas de los que no tenían ni siquiera lágrimas para llorar su pobreza y sufrimiento. Su misión en las periferias de las ciudades y en las periferias existenciales permanece en nuestros días como testimonio elocuente de la cercanía de Dios hacia los más pobres entre los pobres» (Homilía, 4 septiembre 2016). Santa Madre Teresa nos ayuda a comprender que el único criterio de acción debe ser el amor gratuito a todos, sin distinción de lengua, cultura, etnia o religión. Su ejemplo sigue guiándonos para que abramos horizontes de alegría y de esperanza a la humanidad necesitada de comprensión y de ternura, sobre todo a quienes sufren. La gratuidad humana es la levadura de la acción de los voluntarios, que son tan importantes en el sector socio-sanitario y que viven de manera elocuente la espiritualidad del Buen Samaritano. Agradezco y animo a todas las asociaciones de voluntariado que se ocupan del transporte y de la asistencia de los pacientes, aquellas que proveen las donaciones de sangre, de tejidos y de órganos. Un ámbito especial en el que vuestra presencia manifiesta la atención de la Iglesia es el de la tutela de los derechos de los enfermos, sobre todo de quienes padecen enfermedades que requieren cuidados especiales, sin olvidar el campo de la sensibilización social y la prevención. Vuestros servicios de voluntariado en las estructuras sanitarias y a domicilio, que van desde la asistencia sanitaria hasta el apoyo espiritual, son muy importantes. De ellos se benefician muchas personas enfermas, solas, ancianas, con fragilidades psíquicas y de movilidad. Os exhorto a seguir siendo un signo de la presencia de la Iglesia en el mundo secularizado. El voluntario es un amigo desinteresado con quien se puede compartir pensamientos y emociones; a través de la escucha, es capaz de crear las condiciones para que el enfermo, de objeto pasivo de cuidados, se convierta en un sujeto activo y protagonista de una relación de reciprocidad, que recupere la esperanza, y mejor dispuesto para aceptar las terapias. El voluntariado comunica valores, comportamientos y estilos de vida que tienen en su centro el fermento de la donación. Así es como se realiza también la humanización de los cuidados. La dimensión de la gratuidad debería animar, sobre todo, las estructuras sanitarias católicas, porque es la lógica del Evangelio la que cualifica su labor, tanto en las zonas más avanzadas como en las más desfavorecidas del mundo. Las estructuras católicas están llamadas a expresar el sentido del don, de la gratuidad y de la solidaridad, en respuesta a la lógica del beneficio a toda costa, del dar para recibir, de la explotación que no mira a las personas. Os exhorto a todos, en los diversos ámbitos, a que promováis la cultura de la gratuidad y del don, indispensable para superar la cultura del beneficio y del descarte. Las instituciones de salud católicas no deberían caer en la trampa de anteponer los intereses de empresa, sino más bien en proteger el cuidado de la persona en lugar del beneficio. Sabemos que la salud es relacional, depende de la interacción con los 3/4 demás y necesita confianza, amistad y solidaridad, es un bien que se puede disfrutar “plenamente” solo si se comparte. La alegría del don gratuito es el indicador de la salud del cristiano. Os encomiendo a todos a María, Salus infirmorum. Que ella nos ayude a compartir los dones recibidos con espíritu de diálogo y de acogida recíproca, a vivir como hermanos y hermanas atentos a las necesidades de los demás, a saber dar con un corazón generoso, a aprender la alegría del servicio desinteresado. Con afecto aseguro a todos mi cercanía en la oración y os envío de corazón mi Bendición Apostólica. Francisco GD Star

LA VIDA CONSAGRADA, PRESENCIA DEL AMOR DE DIOS

Jornada Mundial de la Vida Consagrada 2019 2 de febrero 2019

En el año 1999 san Juan Pablo II propuso a la Iglesia un año dedicado al Padre con el fin de preparar a toda la Iglesia a la acogida del nuevo milenio. Han pasado veinte años y los obispos españoles desean recordar que la vida consagrada es presencia del amor de Dios. Cada consagrado, con su vida y testimonio, nos anuncia que Dios es Padre, es un Dios que ama con entrañas de misericordia.

Su Hijo Jesús nos enseñó una oración, el padrenuestro, que expresa la relación que Dios tiene con cada uno de nosotros, sus hijos y sus consagrados.

Padre nuestro que estás en el cielo

Configurado con el Hijo, el consagrado vive, unido a Cristo, su relación filial con Dios Padre, a quien no duda de llamar confiadamente todos los días: Abba, papá.

El consagrado vive, aquí en la tierra, su relación fraternal con el Hijo y, junto con Él, mira al cielo, pues sabe que allí tiene un Padre que le espera con anhelo para unir su vida divina con la suya, humana, en un abrazo eterno.

Santificado sea tu nombre

La experiencia de amor filial mueve al consagrado a dejar a Dios ser Padre de su vida y, con su abandono, testimoniar el nombre de Dios: amor.

No un amor de superhombre, sino un amor divino que, superando toda comprensión humana, ha asumido nuestro modo de expresar el amor. De este modo, el consagrado es consciente de que, a través de su caridad, expresa de modo humano el amor divino, nombre de Dios Padre.

Leer más: Jornada Mundial de la Vida Consagrada

 

APERTURA DEL CENTENARIO DE LA MUERTE DE LA BEATA Mª CATALINA IRIGOYEN

 

En el Año 1878, Madre Soledad Torres Acosta, Fundadora de las Siervas de María, llega a Pamplona, procedente de Madrid, reclamada por el Sr. Obispo, don José Oliver para fundar en la ciudad una Comunidad al cuidado de los Enfermos.

María Catalina, conocía las diversas congregaciones que existían por aquel entonces, ella siempre había albergado en su interior el ser religiosa pero se preguntaba ¿Dónde podré realizar mis ideales?

Cuando se instalaron las Siervas de María en la Calle Salsipuedes, se acercó allá, María Catalina,  para ver si podían necesitar su ayuda. Se sintió enteramente atrapada en aquella casa tan humilde, saliendo de aquel lugar con ganas de entregarse a los hermanos enfermos.     

Leer más: APERTURA DEL CENTENARIO DE LA MUERTE DE LA BEATA Mª CATALINA IRIGOYEN

 

PROFESIÓN PERPETUA DE CINCO JÓVENES EN NUESTRA PROVINCIA DE CATALUÑA

 

                                   

 

La vida toda es DON, regalo que Dios nos hace cada día. Regalo de Dios  que recibieron Sor Doris, Sor Judith, Sor Blanca, Sor Rosamie y Sor Renalyn, primeramente en el Bautismo, incorporándose a la Iglesia, creciendo en unas familias cristianas y que un día siguiendo la llamada del Señor, quisieron incorporarse a la familia de Santa María Soledad, en nuestra Congregación de Siervas de María Ministras de los Enfermos.

Leer más: PROFESIÓN PERPETUA DE CINCO JÓVENES EN NUESTRA PROVINCIA DE CATALUÑA

Nuestras Casas

PlayPause
Shadow
Slider

Quien está en linea

Hay 205 invitados y ningún miembro en línea

Visitas

4688045
Hoy
Ayer
Esta semana
Ultima semana
Este mes
Ultimo mes
Todos
1189
1390
7162
4664567
17824
69510
4688045